Y tu lo eres... más que irresistible... irrepetible, inalcanzable...
mujer de piel de espuma marina,
de ojos de faros en tormenta,
de cuello de gaviota peregrina y
de labios tibios como atardeceres lejanos...
Mujer de manos de arena y de nácar,
de pechos de olas cabalgadas,
de cintura de sirena encantada...
inalcanzable por lo divina, no por lo lejana...
Que nos brindas la prístina luz de mirada...
y la promesa del calor en tu regazo
No hay comentarios:
Publicar un comentario